BUNDT CAKE DE DULCE DE LECHE

Tenía un bote de dulce de leche en la cocina desde hacía unas semanas y no sabía muy bien el uso que iba a darle hasta que vi esta deliciosa receta publicada en el canal Quiero Cupcakes. Seguramente conoceréis a Pam y sus maravillosas recetas pero si no es así, os invito a que os paséis por su canal de Youtube porque hace auténticas delicias 💜

El resultado de este bundt cake es increíble: su realización es de lo más sencilla, tiene una miga esponjosa y húmeda y un sabor delicioso, ¿qué más se puede pedir?

Aunque así solo está bastante rico, creo que la próxima vez que repita le voy a añadir un glaseado para hacerlo aún, más irresistible.

La forma tan bonita de este bundt cake se la debemos al molde vintage Star Bundt de la marca Nordic Ware, que si la conocéis estaréis de acuerdo conmigo en que todos y cada uno de sus moldes son preciosos 💟

Bueno, ¿empezamos con la receta?

BUNDT CAKE DE DULCE DE LECHE

Ingredientes:

250 ml de leche entera
20 ml de vinagre de manzana o zumo de limón
330 g de harina
4 huevos
200 g de azúcar moreno
160 ml de aceite de oliva suave
330 g de dulce de leche repostero
Una cucharada de pasta o esencia de vainilla
Una pizca de sal
1/4 cucharadita de bicarbonato
2 cucharaditas y media de polvo para hornear o levadura química

Preparación:

Lo primero que haremos es hacer la buttermilk casera. Para ello agregamos el vinagre o zumo de limón en la leche y removemos. Reservamos.

En un bol amplio ponemos los cuatro huevos y batimos con ayuda de una batidora de varillas eléctrica a velocidad media-alta durante 5 minutos hasta que los huevos blanqueen y doblen su volumen.

Añadimos el azúcar moreno y continuamos batiendo 1-2 minutos.

Ahora vamos a incorporar el aceite de oliva despacio mientras seguimos batiendo mezcla.

Una vez lo tengamos todo integrado, añadimos nuestra buttermilk casera (no os asustéis si veis grumos en la mezcla, es normal) y la vainilla y continuamos batiendo 1 minuto.

Mezclamos la pizca de sal, el bicarbonato y la levadura con la harina y vamos a tamizarla con ayuda de un tamiz o colador sobre la mezcla anterior.

Con las varillas eléctricas a la velocidad más baja que podamos, batimos todo y paramos cuando veamos que en la masa no quedan restos de harina.

El dulce de leche repostero es bastante espeso por lo que es necesario meterlo unos 10 segundos en el microondas para dejarlo algo más fluido.

Mientras tenemos el dulce de leche en el microondas aprovechamos para encender el horno e ir precalentándolo a 180ºC con calor arriba y abajo, sin ventilador.

Vertemos el dulce de leche sobre la mezcla y batimos unos 20 segundos para que se integre con la masa.

Ahora vamos a preparar nuestro molde y para ello lo único que tenemos que hacer es rociarlo con spray desmoldante o en su defecto, mantequilla y harina y asegurarnos de que cada rincón del molde está cubierto.

Vertemos la masa de nuestro bundt cake en el molde, le damos unos golpecitos al molde para que se rompa cualquier burbuja que pueda existir y tapamos con papel aluminio dejando el agujero de la chimenea del molde al descubierto.

En mi horno tardó unos 70 minutos pero recordad que cada horno es un mundo así que os recomiendo que sobre los 50 minutos le quitéis el papel aluminio y lo dejéis unos 10 minutos más. A los 10 minutos pinchadlo y si sale el palillo limpio ya lo podéis sacar pero si aun os sale manchado, dejadlo unos 10 minutos más.

Justo al sacarlo del horno es importante dejar el bundt cake en el mismo molde y pasados unos 10-15 minutos veréis como el bundt se ha despegado perfectamente de las paredes del molde por lo que solo tenéis que darle la vuelta al molde sobre una rejilla y este caerá prácticamente solo.

Ya solo queda dejar que se enfríe completamente sobre la rejilla y…¡listo para comer!